Nuestra idea consiste en llevar la obra de teatro con títeres «Los Fushis» y talleres educativos a comunidades vulnerables de Sonora. El problema que abordamos es la falta de acceso a actividades culturales y educativas, lo que contribuye a la deserción escolar, la violencia infantil y la falta de imaginación en los niños.
El público principal son niños de 6 a 12 años, especialmente en zonas marginadas, así como sus familias y maestros. Utilizamos el teatro y los títeres para enseñar valores como la empatía, el respeto y el cuidado del medio ambiente, mientras fomentamos su creatividad y habilidades socioemocionales.
El impacto será la creación de espacios educativos y culturales accesibles que reduzcan problemas como el abandono escolar y promuevan comunidades más unidas, solidarias y conscientes. Buscamos transformar la vida de los niños y sus comunidades, generando un cambio duradero en la región.
